Al menos 33 personas murieron en Burkina Faso desde agosto, mientras que en el norte de Benín, el 80% de las tierras cultivadas han quedado anegadas, según la OCHA. En Níger, siete personas perdieron la vida a causa de las riadas que han afectado a otras 57.000. Las fuertes lluvias que se registran en el país han destrozado las cosechas y provisiones, despertando temores de hambruna y otras penurias entre los nigerianos, señalan las fuentes.
En Senegal, el norte y el centro del país han sido las áreas más afectadas por las inundaciones, que han causado cinco muertos y dejado sin hogar a miles de familias. En varios barrios de las afueras de la capital, Dakar, las poblaciones afectadas han sido alojadas provisionalmente en centros de acogida. Las inundaciones afectan también a Sierra Leona, donde las víctimas mortales suman ya 103, según indicó la OCHA.
Por su parte, la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) ha anunciado un fondo de emergencia de 657.599 euros para un programa de asistencia a los damnificados en todos los países de África occidental afectados por las inundaciones. La FICR lanzó en agosto un llamamiento a la comunidad internacional para reunir 600.000 euros destinados a asistir a los amenazados por las inundaciones.
Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) estima que se necesitan 12 millones de dólares para ayudar a las comunidades agrícolas de África occidental y central. En 2007, las inundaciones causaron 300 muertos y 800.000 damnificados en África occidental, además de destruir numerosos cultivos e infraestructuras.
Fuente y foto: EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario