Llega una nueva patera a Costa Rica con 54 subsaharianos. Cada vez son más los inmigrantes africanos detenidos en ese país centroamericano. La mayoría llevan a sus espaldas viajes en autobús, avión y barco para tratar de alcanzar la tierra prometida que no es otra que Estados Unidos. Para lograrlo muchos han pagado hasta 7.000 dólares pero, también muchos, son abandonados junto a Costa Rica por las mafias que no se atreven a llegar hasta tierras norteamericanas.Las autoridades de Costa Rica han informado de que una embarcación con 54 inmigrantes africanos ha sido interceptada en las costas caribeñas del país centroamericano. Un portavoz del Ministerio de Seguridad dijo a la prensa que los africanos, 47 hombres y siete mujeres, estaban en un lugar conocido como Paradero de Moín, al este de la capital costarricense.
Los inmigrantes lograron llegar a tierra en una lancha en malas condiciones a cargo de tres tripulantes, quienes fueron detenidos acusados de tráfico ilegal de humanos. Los inmigrantes han sido trasladados a un centro de recepción en el centro de San José. Allí se unirán a otros 40 africanos que fueron interceptados en julio pasado.
Hasta 7.000 euros
Las autoridades costarricenses creen que los 54 inmigrantes interceptados provenían de Eritrea y habían pagado miles de dólares (hasta 7.000) a redes de traficantes para que los trasladaran a Estados Unidos. El gobierno del país centroamericano calcula que los traficantes abandonan a los emigrantes en el área del Caribe en vez de arriesgarse a llegar hasta Estados Unidos. La llegada de africanos a Costa Rica es cada vez más habitual. Si en 2008 las autoridades deportaron a 25 inmigrantes provenientes de Eritrea que habían llegado de manera ilegal, en 2009 ya son 95 los inmigrantes de Eritrea, Etiopía, Somalia y Guinea detenidos. En la mayoría de los casos los inmigrantes huyeron de sus países porque están en guerra y los persiguen por su religión, pensamiento o porque les obligan a alistarse al ejército.
La odisea
Entre la cuarentena de inmigrantes llegados en julio se encontraba un etíope que dio una pista del recorrido de estos inmigrantes: tomó un autobús de Etiopía hacia Kenia porque apoyaba a un partido político opositor al gobernante. De Kenia se desplazó a Sudán, de ahí a España para volar hacia Caracas, donde fue al Caribe de este país para coger un bote rumbo a Costa Rica.
La Dirección General de Migración debe pronunciarse y anunciar si les concede el estatus de refugiado. Nueve de los inmigrantes que esperan esta decisión en el centro de inmigrantes de San José fueron deportados desde Nicaragua, ya que el procedimiento que utilizan las autoridades de la región es mandarlos al último país de procedencia, por lo que no son raras las repatriaciones de africanos de Panamá a Colombia o de éste país a Venezuela.
Fuente: Informativos Telecinco
Foto: EFE
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