Elías Portela Fernández viajó con 20 años a Islandia. El
joven, estudiante de Filología Románica en Santiago de Compostela, se
marchó con una beca Erasmus, pero su affaire en el país nórdico terminó prolongándose durante una década (y subiendo). Lo que empezó siendo una estancia de unos meses para aprender italiano se convirtió en un fenómeno editorial en el país nórdico.
Reykjavík lo atrapó entre consonante y consonante, y Portela se hizo
poco a poco con un idioma, el islandés, que hablan poco más de 300.000
personas (la población de Valladolid ciudad). El gallego llegó a la isla hace once años, pero se instaló allí hace
cuatro. Asegura que en realidad no se ha ido de España, y que se dedica a
hacer 'una labor de puente': "Sigo con un pie en Galicia y trabajando por su cultura. Ni siquiera estoy registrado en Islandia, entre otras cosas, por las leyes de (anti)inmigración".
No hay comentarios:
Publicar un comentario