La policía alerta de la proliferación de proxenetas femeninas procedentes de Rumanía. Estas ex prostitutas captan a jóvenes rumanas a las que ofrecen trabajo en España, en algunos casos les informan que trabajarán como empleadas del hogar. Una vez en el territorio nacional, las proxenetas obligan a las mujeres a ejercer la prostitución callejera.
Les amenazan, les quitan el pasaporte y se quedan con un porcentaje de la recaudación. Según Andrea, nombre ficticio de una prostituta rumana que ha contado su historia a Informativos Telecinco, las chulas son peores que los chulos, no dudan en pegarles, en amenazar con dañar a los hijos de las meretrices para que continúen con su labor.
Hace unos días una joven rumana consiguió escapar de esta esclavitud, se marchó a bordo de un autobús de línea que pasaba por el Polígono Guadalhorce de Málaga, cambió de vida. Pero, según el Observatorio Cívico Independiente, OCI, sólo el 5% de las prostitutas ejercen el oficio más antiguo del mundo voluntariamente, y el 80% reciben malos tratos.
Lo mismo opina el Instituto Andaluz de la Mujer en Málaga, según su directora, Pilar Oriente, la prostitución ha cambiado, antes la mayoría de las prostitutas ejercían su labor voluntariamente, ahora la mayoría lo hace obligada por las mafias.
Fuente: Informativos Telecinco
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