Lejos de ser la panacea que vende el Gobierno de Canarias, lo cierto es que el futuro puerto de Granadilla vaticina más inconvenientes que ventajas. No en vano, al ya conocido daño a la flora y la fauna que denuncian científicos y ecologistas se suma el deterioro que podrían sufrir hasta 29 playas de la costa tinerfeña.
http://www.diariodeavisos.com/2010/diariodeavisos/content/20590/
No hay comentarios:
Publicar un comentario