La china más guapa de España es… El acento madrileño delata a Elisa Zheng, de 18 años, madrileña que ha nacido y crecido en el barrio de Argüelles. Apenas habla mandarín, solo el dialecto chino de Shanghái, la ciudad natal de sus padres. Pocos minutos después de ser elegida Miss China y todavía algo nerviosa, le cuesta traducir el significado de su nombre chino, Qi Lin: “Es una especie de animal antiguo que daba suerte”, balbucea ante la mirada cómplice de su emocionada madre.
Porque como la mayoría de los chinos que viven en España, Elisa tiene su nombre occidental y el de su país natal. Cristina, Lidia, Paloma… Pero también Yao (que quedó segunda, Dama de Honor) o Ayumi eran algunos de los nombres de las 16 finalistas del concurso Miss China 2010 que se celebró el pasado sábado, y que organizó la revista de ocio Xishang, que se edita en España desde mayo y es propiedad del grupo hispano – chino Haike Marketing. A la gala no le faltó ningún ingrediente de toda elección clásica de una reina de la belleza: desfiles en biquini, traje de noche y hasta en chándal. Discursos emocionados y sonrisas postizas. Actuaciones de cante y baile – algunas parecían sacadas de un videoclip de raperos o de un cabaré – , alfombra roja, jurado internacional (o binacional, porque sus miembros eran chinos o españoles) y mucho público.
Bajo las lámparas de araña del hotel Miguel Ángel, que organizó el evento, centenares de jóvenes chinos sacaban sus móviles de última generación para tomar fotos de sus favoritas. Según el Informe de Población Extranjera, realizado el pasado junio por la Comunidad de Madrid, en la región hay casi 45.000 chinos, la séptima nacionalidad con mayor presencia. “Vengo de Alcorcón a ver a mi amiga Jessica, la número 7. A ver si gana”, decía orgullosa Bohui, de 22 años, que ocupaba su asiento un buen rato antes de que empezaran los desfiles. Jessica no ganó. Elisa, la triunfadora, era la número 16.
Esperanza Liu, presidenta de la revista Xishang, explicaba que la intención de su publicación es “presentar a los españoles cómo son los chinos de hoy, hacerles ver que son parecidos a ellos en su forma de vivir”. “Estas jóvenes son el futuro de la comunidad china en España. Algunas son estudiantes, y otras son ya de segunda generación”, explicaba sobre el escenario una emocionada Liu, también presentadora del concurso. Contaba que estos eventos chocan con la tradición china. A muchas jóvenes les costó posar en ropa de baño. Con este concurso, Elisa (futura azafata) y Yao (estudiante de finanzas) han ganado algo de dinero y un viaje. No saben qué harán con los premios. Elisa piensa que, por ahora, es una experiencia nueva y una oportunidad. Que quiere celebrarlo con sus amigos, muchos de ellos latinos, que la esperaban ansiosos en la recepción. Y que quiere quitarse los tacones.
Publicado en el diario El País
Autor: María Porcel Estepa
Foto: Cristóbal Manuel
Porque como la mayoría de los chinos que viven en España, Elisa tiene su nombre occidental y el de su país natal. Cristina, Lidia, Paloma… Pero también Yao (que quedó segunda, Dama de Honor) o Ayumi eran algunos de los nombres de las 16 finalistas del concurso Miss China 2010 que se celebró el pasado sábado, y que organizó la revista de ocio Xishang, que se edita en España desde mayo y es propiedad del grupo hispano – chino Haike Marketing. A la gala no le faltó ningún ingrediente de toda elección clásica de una reina de la belleza: desfiles en biquini, traje de noche y hasta en chándal. Discursos emocionados y sonrisas postizas. Actuaciones de cante y baile – algunas parecían sacadas de un videoclip de raperos o de un cabaré – , alfombra roja, jurado internacional (o binacional, porque sus miembros eran chinos o españoles) y mucho público.
Bajo las lámparas de araña del hotel Miguel Ángel, que organizó el evento, centenares de jóvenes chinos sacaban sus móviles de última generación para tomar fotos de sus favoritas. Según el Informe de Población Extranjera, realizado el pasado junio por la Comunidad de Madrid, en la región hay casi 45.000 chinos, la séptima nacionalidad con mayor presencia. “Vengo de Alcorcón a ver a mi amiga Jessica, la número 7. A ver si gana”, decía orgullosa Bohui, de 22 años, que ocupaba su asiento un buen rato antes de que empezaran los desfiles. Jessica no ganó. Elisa, la triunfadora, era la número 16.
Esperanza Liu, presidenta de la revista Xishang, explicaba que la intención de su publicación es “presentar a los españoles cómo son los chinos de hoy, hacerles ver que son parecidos a ellos en su forma de vivir”. “Estas jóvenes son el futuro de la comunidad china en España. Algunas son estudiantes, y otras son ya de segunda generación”, explicaba sobre el escenario una emocionada Liu, también presentadora del concurso. Contaba que estos eventos chocan con la tradición china. A muchas jóvenes les costó posar en ropa de baño. Con este concurso, Elisa (futura azafata) y Yao (estudiante de finanzas) han ganado algo de dinero y un viaje. No saben qué harán con los premios. Elisa piensa que, por ahora, es una experiencia nueva y una oportunidad. Que quiere celebrarlo con sus amigos, muchos de ellos latinos, que la esperaban ansiosos en la recepción. Y que quiere quitarse los tacones.
Publicado en el diario El País
Autor: María Porcel Estepa
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